16 marzo 2021

#EstrellasDeTinta reto de marzo 2021


Este relato y microrrelato se engloban en el reto de escritura creativa #EstrellasDeTinta creado por KattyLas normas son estas para poder participar y así entender la dinámica.

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La sombra a la luz


Relato: 


Un día más. Otro amanecer preguntándome cómo habrá dormido, cómo habrá despertado, si vuelve a tener migrañas o simplemente qué necesita. ¿Va a ir hoy a trabajar? ¿Sin desayunar como suele hacer? Como su auxiliar, es lógico que me preocupe por estos pormenores. El trabajo de administrativa no es para nada peccata minuta. Si yo la mayor parte de las veces regreso a casa con un humor de perros, no me quiero ni imaginar cómo está ella que es la jefa de departamento. 

Tan solo sé que necesito una buena ducha, a ver si así me espabilo un poco. Porque la verdad, mi nombre no es que me ayude demasiado. Sí, lo que has oído y te preguntarás por qué razón. Me llamo Alba y lo primero que hago, para rendirle honor a mi nombre, es asomarme por la ventana y aprovechar esos primeros rayos que espero me recarguen las pilas. Bueno, las pilas y algo más. Y ese algo más lo llevo necesitando como el respirar desde hace ya un año largo.

Es extraño sentarme cada mañana en la península de mi cocina a desayunar… a solas o no tanto ya que en mi mente siempre late la misma idea. ¿Qué digo idea? ¡El mismo imposible! Espero no acabar hecha un manojo de nervios cuando la tenga delante. Me despierto con un nudo en el estómago y no precisamente por haber tomado algo en mal estado. No puedo más.

Desde que entro en la oficina me sucede, desde mi primer día mejor dicho, desde que la vi allí por primera vez en esa oficina. ¿Por qué no hablo con propiedad cuando me quiero referir a ella? Se dice que es amor a primera vista pero ella o no me corresponde o manda señales contradictorias. No, está en mi mente. Dios, creo que estoy empezando a volverme loca. Y más loca me volveré si no llego a tiempo. Creo que lo mío es crónico: siempre corriendo, hasta en sueños pero como no aligere... ¿Llegar? ¡Voy a llegar tarde con el bochorno colgado en mi espalda como San Benito!


Son las siete en punto o traducido: me quedan exactamente cuarenta y cinco minutos entre terminarme el desayuno, ducharme, cepillarme los dientes, darle un último repaso a las diapositivas del  nuevo proyecto y ¿volar? Ya me gustaría comprarme un propulsor o, más fácil de instalar, unas alas a poner en los tobillos cual Hermes; unos tanto y otros tan poco.

Miro el reloj de nuevo, pero esta vez con mayor calma; cosa rara en mí. Marca las ocho menos cuarto. Suerte que el metro acaba de llegar y no tengo más que saltar al interior y encajar en el vagón con ayuda de un calzador imaginario. Qué desesperación y menos mal que son solo tres paradas. Sin embargo, ese pequeño detalle no me libra de transformarme en otra sardina enlatada. Me mata el hecho de solo pensar que la decepciono por una metedura de pata como esta.

Queda menos de cinco minutos para las ocho.

Será sensación mía pero me parece que llevo la camisa descuadrada. Qué vergüenza. Si me da tiempo entro en el aseo y me la abotono en condiciones; si no, me la meto por dentro del pantalón y no me quito la chaqueta de encima aunque me esté muriendo de calor: hoy se esperan treinta y tres grados, qué gracia. Me gustaría que uno de esos rayos de sol me pulverizara en el acto para no tener que esconderme de miradas verdugas, incluida la tuya. Este es uno de tantos contrastes con respecto a ella… ¿Y por qué razón me refiero a ella como “ella”? Hasta donde me llega la memoria tiene nombre propio, uno potente para una mujer potente y con Ópera dedicada. Suena bien eso de Carmen al Alba. O Carmen a mí. Bueno, mejor es que esté en la sala de briefing y le haga entrega de mi trabajo. Quiero que nuestro nuevo batido energizante con sabor a maracuyá le entre por los ojos a la directora junto con el resto de partners y acabe por dar su visto bueno. El dossier que he elaborado constituye una prueba irrefutable de su viabilidad y competitividad, aparte de que el propio producto destaca por su diseño. Y el no tener azúcar añadido ya es motivo suficiente para tener un nicho de mercado aceptable. Apto para mujeres de edad comprendida entre los treinta y los cuarenta. Nosotras mismas satisfacemos el perfil. Me imagino promocionándolo juntas. Una buena manera de empezar a estrechar lazos…

—¡Hola, buenos días! ¿Tierra llamando a Alba?

—¿Qué? Disculpa, Carmen. Es que no sé dónde tengo la cabeza…

—No te preocupes. Oye, vas a tener que exponer tú. Me ha surgido un contratiempo y he de marcharme en seguida. Ya he hablado con la directora y no ve ningún inconveniente. Así que es tuya, aprovecha esta oportunidad y cómetelos con patatas. Te llamo luego y me cuentas.

«Con patatas me como otra cosa…»

—Gracias por los ánimos, Carmen. No todos los días se te presentan chollos así.

Solo vi su espalda. ¿Y por qué quedarme únicamente con la espalda? Otra vez sin hablar con propiedad: solo vi su silueta.

Llega el momento de exponer, mi momento. Seguro que ya se me nota el rubor. En estos casos un chupito no me viene mal, pero daría el cante rápido pues no soy una bebedora experimentada que digamos. Un trago y hace estragos. ¡Anda, más encima coge y me sale la vena poética! Qué bien, es la señal inequívoca de que la voy a pifiar.

Tranquila Alba, tranquila. Ahora es cuando el supuesto poder que esconde mi nombre ha de cumplir su función que no es otra que atraer la iluminación hacia mí y me otorgue toda la locuacidad habida y por haber. No me gustaría quedar en ridículo y llevarme la fama de mala profesional. ¡No, por favor! Un despido me apartaría de ella, de Carmen, para los restos. Céntrate y haz tu jugada ganadora.


Entro en el salón. Mientras mi audiencia respira expectación, yo no respiro, trato de engullir la tensión que escapa por mis poros. Noto que me observan con rostro extraño. Y mira que me esmero en aparentar calma, ¿pero de nada me sirve asomarme por la ventana cada mañana e impregnarme de ese haz tan codiciado?

Solución: pensar que eres tú mi público.

Hora después, está hecho. Eso es, el método funciona. Lo suelto todo como si es un parto, en este caso, verbal. Y qué a gusto, chica. Si es que eres mi talismán. Inesperadas las felicitaciones pero las recibo de prácticamente todos los asistentes, similar a quedarse bajo una cascada y recibir este mini baño de masas. Pero me faltas tú, Carmen.


Salgo de la oficina a media tarde. Aún no quiere empezar a oscurecer por más que sea ese mi deseo. Estoy ya por Plaza Mayor cuando de pronto me suena el móvil: un WhatsApp de ella, de Carmen. ¡Me espera en el Rincón! Cruzo una calle, espero a que se ponga en verde el semáforo y cruzo otra con el alma al rojo vivo. Y ahí llego. Alzo un poco más la vista y la veo levantar el brazo.

—Por fin, ya tenía ganas de salir de la oficina, dejar atrás la condenada rutina y contarte cómo me ha ido y…

Carmen me hace una señal para que guarde silencio. Ahora me toca escuchar.

 —En primer lugar, pedirte que me perdones. Te la he jugado. Claro que la directora no sabe nada, pero me las he ingeniado  para contemplar tu gran actuación digamos que entre bambalinas. Sinceramente, has estado espectacular con el aplomo demostrado y saber estar del que ni eres consciente o te da miedo reconocer… Como también me ha valido para aclarar todo género de dudas.

Acto seguido, y a traición, ensambla sus labios en los míos para quedar fundidas en un beso, cuando me acabo dando cuenta de que esto es lo más parecido a sacar la sombra a la luz y que no solo basta con asomarse cada mañana a la ventana


@0606Anas, marzo

Título: La sombra a la luz

Estrellas mes: 3

Palabras: 1384

Objetivo Relato: #12

Objeto oculto 1: #4

Objeto oculto 2: #5

Extras: Prot. Femenina, test de Bechdel

Comentarios: Ídem a los de la otra lista. 

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No es tan oscuro


Microrrelato:

«Ay, Alba, espejo del mundo, mira bien, que tu redondez es algo luminiscente y no tan oscuro como lo pintas.»
Es cierto que mi nombre impone, pero más lo hizo el brillo en sus pupilas al pedirle que se casara conmigo...
 

@0606Anas, marzo

Título: No es tan oscuro

Palabras: 41

Objetivo Micro: #17

Objeto oculto: #35

Estrellas: 3

Recomendación: The Prettiest Star (3): cafu za limin de  @isefran79, febrero

Enlace: https://supeingoreson.wordpress.com/2021/02/03/estrellas-de-tinta-2021-febrero-the-prettiest-star-3-cafu-za-limin/

Comentarios: @isefran79, febrero;  @kalen76, febrero

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14 comentarios:

  1. ¡Bienvenida al reto!
    Un relato muy interesante. Transmites muy bien el agobio De Alba por llegar tarde, por la presentación, por su situación con Carmen.
    Muy entretenido y dinámico. Y el final, apoteósico.
    Añades un buen broche final con el micro. Conciso, directo y muy bonito.
    Enhorabuena.
    Saludos y nos vamos leyendo.

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    1. Muchas gracias, Isefran. Simplemente dejé de ser yo y asumí la identidad tanto de la acomplejada Alba como de la empoderada Carmen. El moviento lo otorgan los contrarios, que seguirán atrayéndose en aras de mantener el equilibrio.

      Que tengas muy feliz jueves que yo mientras me voy a "pilatear" un poco. ;-)

      Si una cosa he aprendido (y sigo en ello) de todo lo que he leído hasta la fecha es dotar de vida a todo lo que salga de tu puño, letra y especialmente del alma.

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  2. Buenas,
    Me resultado muy entretenida la manera de relatar el relato, queda muy simpático pese a tratar el tema del agobio y el estrés. Así que, genial por esa parte.
    El final me ha dejado perpleja. ¿Era una prueba de amor el ponerla a exponer sola? ¿O me he perdido en algo? Como sea, me encanta que termine cumpliendo sus deseos.
    ¡Y el juego con los nombres! Me ha parecido delicioso leer cada juego de palabras que has incluido.
    El microrrelato está en su punto, aunque tendría que ver que objetivo es en la lista. No logro entreverlo.
    ¡Nos leemos pronto!

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    1. Finales ambiguos, a veces abiertos... Más que una prueba de amor (que también) es la forma que encontró Carmen de decirle indirectamente que ella puede y que los miedos están para superarlos.

      Ahí reafirma sus sentimientos hacia Alba, a quien siempre ha tratado de infundir valor.

      El micro viene a ser el epílogo. El recuerdo de una pedida de mano en un bar restaurante en la Plaza Mayor, con la cercana puesta de sol era la manera que encontré para escenificar un relato súper positivo, objetivo número 17 de la lista.

      Feliz noche y claro que nos seguimos leyendo, Érica.

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  3. ¡Hola!
    Oh! Me ha encantado el relato como refleja de bien ese agobio no solo por el estrés de llegar tarde si no por el qué pensará de ella. Y ¿ese final? Simplemente genial, le has dado un tono más esperanzador y sobre todo dejando esa sensación de sorpresa. Fantástica la forma de entrelazar uno con otro(:
    ¡Besos!

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    1. Buena tarde, María C:

      Si una cosa me enseñó Edgar Allan Poe fueron esos finales que tienen tanto de enigmático, impactante, emocionante y sobre todo abiertos que permiten a quien los lea darles su propio final...
      El micro como si de un epílogo estuviéramos hablando.
      Me pareció interesante contrastar sendos puntos de vista y, al parecer, ha logrado el efecto deseado: como la vida misma.

      Agradecida por tu comentario.

      Nos seguimos leyendo!!

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  4. Buenas tardes

    Primer relato y primer micro tuyo que leo. Me ha gustado la forma en que está escrito. Es muy dinámico y muy romántico. Por otro lado, está bien descrito todo lo que siente la protagonista: el abogio, los nervios, el deseo...

    Me gusta tu manera de narrar y tampoco he visto erratas.

    Por último, no quiero dejar destripes, pero me ha gustado como has relacionado el relato y el microrrelato.

    Te seguiré leyendo.

    Un saludo.

    Juan.

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    1. Hola Juan buena tarde!

      Tan solo soy una autora novel aficionada a la lectura. A raíz de eso, inevitablemente cogí afición por escribir, por experimentar y crear un estilo propio.
      Simplemente me dejé llevar y quise empatizar con mis personajes, vestirme con su piel, pensar y sentir como ellas (en este caso).

      La cuestión es que me pareció estar viendo la película y solo me limité a narrar lo mejor que pude las escenas finales.

      Muchas gracias por tu comentario.

      ¡Nos leemos!

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  5. Buenas tardes, Anastasia
    Me he quedado gratamente sorprendido de tu calidad narrativa. Es muy fácil leerte, tu narración es muy fluida y usas un lenguaje rico y muy adecuado con la historia que cuentas. Me ha resultado curioso la manera de escribir en forma de diario hacia el lector y cómo a veces mencionas a la jefa en tercera persona y otra directamente. La verdad es que el contraste hace que se resalte el mensaje, me ha parecido interesante. Revisa el relato porque hay alguna cosilla a pulir, entre otras me parece que sobra un "como" en una frase y al final del cuarto párrafo, en "aligere llegar voy a llegar tarde" creo que te sobra el primer "llegar", en otra me falta algún subjetivo (en mi mente tendría que ser "Lo suelto todo como si fuera un parto"), en resumen, tonterías menores que se perciben leyendo el relato varias veces. La imagen elegida del beso de Klimt es uno de mis cuadros preferidos. Una historia redonda y muy bien escrita. Felicidades, te seguiré leyendo cada mes.

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  6. Hola Kalen buena tarde.

    Resumido: «Consejos vendo que para mí no tengo» XD.
    Efectivamente ese «como» sobra, no tendría sentido la oración. Lo paso por la guillotina, así como el resto de erratas (inconcebibles) porque me gustan las cosas bien hechas. Para chapuzas mejor ni presentarse, ¿no crees?

    Al lector siempre hay que darle lo mejor o, al menos, intentarlo.
    Darte las gracias por el comentario, siempre es enriquecedor.

    Menos mal que nadie nace sabiendo.

    Nos seguimos leyendo

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  7. ¡Bienvenida al reto!

    Me marco como la del anuncio: Estoy In love con este post. Me encadeno aquí mismo y me trago la llave

    ¡Estaré esperando las siguientes cosas que escribas!

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    1. Buen día, Unknown:

      El factor sorpresa es lo que te «encadena» aquí. Trato de hacer cosas diferentes y que dejen al lector sin aliento.

      Prometo que el próximo post no va a dejar a nadie indiferente.

      Tan solo decir que gracias a la lectura, he aprendido que los buenos escritores tienen por máxima dejar a su público con la miel en los labios.

      Agradecida por tu comentario.

      ¡Feliz jueves!

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  8. ¡Nueva lectora!

    El micro me ha parecido que tenía una fuerza inmensa en tan pocas palabras. Me fascina mucho la capacidad que tenéis algunas personas para hacer cosas así. A mí los micros me cuestan mucho, no consigo contar tanto en tan poco, así que tienes toda mi admiración.

    Sobre el relato, me ha encantado. He estado dentrísimo desde el primer momento y el final me ha gustado mucho porque me ha sorprendido bastante el giro pero me ha dejado el corazón calentito.

    Por proponer alguna mejora diría que en la frase "Queda menos de cinco minutos para las ocho" el verbo iría en plural y sería "quedan" para que concuerde con "cinco minutos" pero sinceramente llevo más de cinco minutos pensando si es solo porque me suena mejor o hay una regla que ahora mismo no me viene a la mente.

    En cualquier caso, genial :D

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    1. Buen día, Pirra:

      Anoche estaba molida y por ello contesto ahora.
      El micro tiene esa potencia porque reprenta un pensamiento y afirmación de Carmen. Ella es digamos la caña de España y como tal, sus gestos, forma de hablar, pensar y sentir han de ir en sintonía. Pensé que potenciar emocionalmente al lector era la clave de crear esa conexión entre ambos.

      Sin ir más lejos ¿te torturarías leyendo algo que no te despierta nada ni resuena contigo? Yo desde luego que no, ni aun cobrando por ser masoca.

      Respecto al «queda menos de cinco minutos» si te soy sincera, tenía dudas acerca de si dejar la construcción como un impersonal o convertir los minutos en el sujeto; finalmente, los transformé en un complemento directo por aquello de ¿Qué queda? Queda menos de cinco minutos y así daría pie a la forma impersonal. ¡Qué vengan los de la RAE! XD

      Pero bueno, lo importante era causar impacto y, por lo que veo, está bastante logrado.

      Gracias de nuevo; ¡nos seguimos leyendo!

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